¿Calidad o precio?

Javier es una persona que se dedica a las ventas y que suele viajar por trabajo con frecuencia a los mismos lugares, por lo que suele moverse por entornos más o menos conocidos, pero en esta ocasión está en una ciudad que no conoce, que nunca había visitado antes y decide entrar a una cafetería a tomar un café. No tiene referencia alguna sobre lo que se va a encontrar, pero podemos intuir que en su trato con los camareros se topará con una de las situaciones que describo a continuación:

a) Pasaremos totalmente desapercibidos, nos darán un café normal y corriente y un servicio como el de cualquier otro lugar. Como diría un amigo mío, “ni carne ni pescado”. Si en un par de horas nos piden que volvamos al mismo lugar, probablemente ni sepamos cual era ni donde esté.

b) Nos darán un café excelente o realmente malo, con un servicio anodino y no diferenciado. En el primero de los casos es posible que dos horas después sí que nos acordemos de donde lo hemos tomado, en el segundo, seguro que sí y diremos que, ahí mejor que no.

c)  Obtendremos un servicio nefasto: lentitud, parsimonia, pasividad, apatía, … que usualmente va acompañado de suciedad, malas maneras e incluso mala educación, prepotencia o soberbia. Habitualmente nos ponen de mala gana y hasta nos “amargan” el momento. Aunque el café sea excelente nuestra experiencia es negativa y no volveremos.

d) Nos ofrecen un servicio excelente, con un camarero simpático, alegre, humano, profesional. Nos alegra el día, nos hace estar más contentos, pasamos un gran momento … ¿y el café? Qué más da como sea el café.

Si tuvieras que volver, ¿a cuál de los 4 lugares lo harías?

Hoy en día lo que marca la diferencia en donde elegimos gastar el dinero nos suele ser el producto que tengan, sino la experiencia que nos hacen sentir con nuestra compra y esa la marcan las personas con su actitud.

La buena noticia es que la actitud es una elección y que tú puedes elegir la que tienes en cada momento.

En función de lo que escojas atraerás a unas personas u otras. Tú eliges qué tipo de clientes quieres.

Por cierto, tú como vendedor, ¿cuál de los cafés servirías?

Santiago Torre

#EmbajadorEDVE